Nuestra NEBRIJA 42 - Julio 2022

es más que nadie, todo suma, así que muchísimas gracias a todos por vuestra ayuda y colaboración. Y como nada se detiene, y todo fluye, ya estamos en la recta final de la elaboración de nuestro próxi- mo plan estratégico 2022-28, con una gran partici- pación de los miembros de la comunidad Nebrija. Es un plan ambicioso, que aspira a seguir progre- sando para colocar nuestra universidad entre las mejores en docencia, investigación y transmisión del conocimiento y la cultura, misiones sacrosan- tas de la universidad. Además, queremos hacerlo a nuestra manera, al modo Nebrija, tomando por bandera la excelencia en lo que hacemos, y ofre- ciendo a nuestros estudiantes una formación inte- gral, que combine la exigencia y el rigor académico con otras competencias y valores personales que les permitan acceder con éxito al mundo laboral y profesional, contribuyendo así al desarrollo de una sociedad mejor para todos. La internacionalización es otra de nuestras señas de identidad para alcanzar una formación integral. La realidad es multidimensional y diversa, así que cuantas más culturas y puntos de vista se incorporen en la formación, mayor será el abanico de opciones profesionales y personales de nuestros estudiantes. La diversidad y la inclusión contribuyen al intercam- bio y a la polinización de las ideas, actuando como catalizadores de la formación universitaria. Nos afa- namos en potenciar la empleabilidad de nuestros egresados, para que se integren en el mundo laboral lo antes posible. Para ello, establecemos unas rela- ciones simbióticas con las empresas, produciéndo- se un beneficio mutuo, ellas emplean y forman a nuestros estudiantes, y nosotros les aportamos el valor Nebrija, nuestros conocimientos y métodos de investigación. Nebrija constituye así un ecosistema amigable en el que las empresas se sienten a gusto y encuentran soluciones científicas y técnicas a mu- chos de sus problemas. Como bien señala Antonio Abril, miembro de nuestro Consejo Rector, para que estas relaciones sean fructíferas las universidades deben orientarse hacia la solución de problemas de su entorno y las empresas e institu- ciones deben apostar por el talento y el conocimiento. Pero el sello Nebrija no se pue- de entender sin dos actitudes que atraviesan e impregnan todos los demás valores: el comportamien- to emprendedor y el aprendiza- je continuo como organización. Tener iniciativa, curiosidad, confianza en uno mismo, optimismo y atrevimiento son claves para cultivar una actitud emprendedora, bien sea para generar nuevas em- presas y proyectos, para mejorar un ámbito profe- sional específico (intra-emprendimiento), o para perseguir alguna iniciativa más personal o social. Aprender continuamente y combinar de forma equilibrada lo clásico con lo innovador es otra de nuestras señas de identidad. Cabalgamos a hom- bros de gigantes, nos debemos en gran parte a quienes nos precedieron, hay que construir a partir de lo ya hecho, sin caer en adanismos vacuos. Los valores clásicos, destilados tras siglos de existencia humana, nos vertebran como sociedad y nos ayu- dan a desarrollar una vida guiada por el humanis- mo, en el que las personas son el centro de todo. Así que no nos olvidamos de valores seculares como la equidad, amistad, liderazgo, paciencia, humildad, tolerancia, generosidad, laboriosidad, lealtad, mesura, orden, austeridad, solidaridad, respeto, gratitud, responsabilidad, o voluntad, entre otros. Todo lo dicho se resume en las siete palabras mágicas con las que nos gusta sin- tetizar nuestra filosofía Nebrija: Pasión por saber y pasión por emprender. Reite- rar el agradecimien- to a toda la comu- nidad Nebrija por el esfuerzo reali- zado para sacar adelante el curso presente, y mu- chos ánimos para iniciar el siguiente con fuerza, seguro que entre todos lo conseguiremos. El sello Nebrija no se puede entender sin el comportamiento emprendedor y el aprendizaje continuo como organización 5 Nuestra Nebrija