El Clúster de Ciberseguridad de Madrid ha iniciado su andadura en este mes de septiembre. Nace con la finalidad de sensibilizar y formar a empresas y ciudadanos en la importancia crítica de la ciberseguridad; reforzar el emprendimiento, incluyendo el desarrollo de nuevas empresas y el crecimiento de las ya existentes; contribuir a generar talento y mejorar la empleabilidad; y posicionar a Madrid y su región como ciudad impulsora de la ciberseguridad.
Promovido por el Ayuntamiento de Madrid, y con la colaboración de la Comunidad de Madrid y el Instituto Nacional de Ciberseguridad -entidad dependiente del Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital a través de la Secretaría de Estado de Digitalización e Inteligencia Artificial-, el Clúster está constituido, a la espera de acoger a otros miembros, por Accenture, GMV Soluciones Globales Internet, ISMS Fórum, MAPFRE, Red de Excelencia Nacional de Investigación en Ciberseguridad (RENIC), SANITAS, Singularbank y Sistemas Informáticos Abiertos SIA (INDRA) y la Universidad Nebrija.
Para Juan Cayón, catedrático del Departamento de Derecho y adjunto al Presidente para las relaciones institucionales de la Universidad Nebrija, “en el mundo en el que vivimos, con una dependencia tecnológica máxima, incrementada además por la emergencia sanitaria, la ciberseguridad debe estar presente en la mente de todos, desde las empresas a la sociedad civil. El Clúster aglutina a las principales entidades para compartir experiencias, concienciar y generar nuevos productos de seguridad cibernética, lo que resulta vital en un entorno tan mutable y ante amenazas y vulnerabilidades que se descubren cada día”.
Cayón precisa que la difusión de una cultura de la ciberseguridad es “un punto clave que en el ámbito autonómico hasta ahora estaba vacante”. Además, “la potencia de Madrid como comunidad autónoma altamente tecnificada y en la que residen algunas de las principales empresas del sector nos dota de una potencia y capacidad de servicio muy grande”. Al integrarse operadoras, fabricantes de software, consultoras e instituciones como el Ayuntamiento de Madrid, la Comunidad de Madrid y la Universidad Nebrija, “la transversalidad de la aproximación a los problemas reales esperamos sea muy efectiva”.
La Universidad Nebrija es socia fundadora y promotora del Clúster de Ciberseguridad y en la actualidad, la única universidad presente de manera institucional. La implicación y la puesta en valor de la experiencia como formadores e investigadores hace que Nebrija “tenga ya un nombre consolidado en el ámbito de la seguridad”. Entre los profesores habituales se encuentran personas de “indudable valía y experiencia” como el general Fernando Davara o Bernardino Cortijo, codirector del Master en Ciberdelincuencia. Además de la oferta actual (grado, máster y doctorado), que ya tiene líneas y derivaciones específicamente referidas a la ciberseguridad, el compliance, la protección de datos o la ciberdelincuencia, la Universidad Nebrija, a juicio de Juan Cayón, “está en condiciones de generar nuevos títulos propios adaptados a las necesidades de las empresas, particularmente las PYMES, que son, hoy por hoy, el eslabón más débil de la cadena”.
Un poco de historia
En 2016, el Ayuntamiento de Madrid inició un proyecto para la detección y promoción de aquellos sectores estratégicos caracterizados por la alta cualificación de sus recursos humanos y el uso intensivo de tecnología. Entre los sectores que se identificaron como claves estaba el de la ciberseguridad. Tras un análisis del sector, el Ayuntamiento decidió impulsar el desarrollo de un Clúster de empresas y entidades que trabajan para hacer más seguro el uso de internet por parte de empresas y ciudadanos en el área de Madrid y para impulsar el emprendimiento en estos ámbitos, atrayendo y generando talento e inversión. Dadas las especiales características del sector, y la filosofía propia de los clúster, este se construye a través de la colaboración público – privada, en una coordinación lo más estrecha posible entre los tres niveles de la Administración -local, autonómica y central- y con una gestión e impulso de su actividad a través de una asociación sin ánimo de lucro.
Fotos: Archivo Nebrija
