Fernando Tomé escribe en el vademécum del sector legal contra la pandemia

El libro Innovación y Tendencias. Sector Legal 2021, que acaba de editar Wolters Kluwer, incluye un capítulo de Fernando Tomé, vicerrector de Estudiantes y Empleabilidad de la Universidad Nebrija y director de la Fundación Antonio de Nebrija. El manual aborda las consecuencias y los cambios de la pandemia para el sector legal, donde la innovación tecnológica y la correcta adaptación a este nuevo contexto vital y laboral son determinantes para el éxito. “No parece aventurado calificar este trabajo como el vademécum del sector legal para los próximos años, una fuente primordial de conocimiento sobre los remedios más adecuados para prevenir y afrontar los riesgos que se derivan de una situación perfectamente anormal que, aparentemente, se ha instalado en nuestras vidas con la intención de quedarse”, señalan los editores.

Desde Wolters Kluwer instan a “romper patrones, cambiar de perspectiva, trabajar en equipo, pensar en los demás, ser solidarios y sacar del armario las habilidades consideradas `blandas´, como la comunicación, la empatía o la inteligencia emocional, que han demostrado ser claves para cohesionar y estimular a equipos dispersos compuestos por personas golpeadas física y mentalmente por la situación”.

En Innovación y Tendencias. Sector Legal 2021, 35 expertos del sector jurídico en administración pública, gestión y liderazgo, comunicación, innovación tecnológica y metodológica, responsabilidad social corporativa y formación muestran su visión a los profesionales del Derecho sobre cómo afrontar estas transformaciones. Además de Fernando Tomé, escriben en el volumen José María Alonso, decano del Ilustre Colegio de Abogados de Madrid; Jordi Fernández, director de Comunicación de Cuatrecasas; M.ª Eugènia Gay, decana del Colegio de la Abogacía de Barcelona; Julio Lujambio, socio de Corporate de Pérez-Llorca; Victoria Ortega, presidenta del Consejo General de la Abogacía Española; José Luis Risco, director de Recursos Humanos de EY en España; Dionisio Uría Ronsman, director de Relaciones Externas en Uría Menéndez; e Ignacio Vasallo, director Senior de Simon-Kucher & Partners, entre otros.

En el capítulo El nuevo escenario de la profesión jurídica. La formación oficial como antídoto ante el desempleo, la polimatía como nueva exigencia laboral y la presencialidad híbrida como nuevo entorno profesional, Fernando Tomé argumenta sobre tres aspectos en torno a las profesiones jurídicas: “el cuestionamiento de la necesidad de titularse, las nuevas tendencias en la formación, que faciliten la adecuación a los actuales requerimientos de los empleadores, que demandan perfiles polímatas, y la necesidad de adaptarse a la nueva modalidad de trabajo en presencialidad híbrida”.  A su juicio, “esta triple encrucijada va a definir a los nuevos profesionales del ámbito jurídico”.

Extractos del capítulo de Fernando Tomé en el libro Innovación y Tendencias. Sector Legal 2021

“[…] podemos sacar, pues, al menos cuatro conclusiones generales. En primer lugar, que la universidad española reduce a casi la mitad el riesgo de desempleo, de manera destacada para los titulados en el ámbito jurídico. Segundo, que la universidad otorga un conocimiento, asociado a una titulación, que las empresas exigen, aunque las titulaciones jurídicas no brillan en este aspecto. Tercero, que las universidades deben mejorar en su capacidad de convertir a los estudiantes en más atractivos para las empresas y despachos, frente a los no universitarios. Y cuarto y último, que la universidad española debe mejorar su proyección frente a la sociedad mundial”.

“Un ejemplo de palabra recuperada, que empieza a sonar de nuevo como una de las capacidades más demandadas y valoradas por los reclutadores y buscadores de talento, es la polimatía. La polimatía, definida como la capacidad de ser especialista en ámbitos de conocimiento distantes, se ha convertido en el santo grial de los procesos de selección y en concreto, de los que afectan a los profesionales del ámbito jurídico”.

“Pero, ¿qué es la polimatía? No es una competencia, no es algo que dependa solo de una actitud, como el valer para todo, es mucho más. Un polímata, que es lo que empieza a pedirse en los procesos de selección y promoción, es quien demuestra ser un especialista en áreas distintas. No es solo que esté dispuesto a hacer varias tareas, no es tampoco que sepa un poco de muchas cosas, es que sepa mucho, con un elevado nivel de profundidad, de varias áreas”.

“Muchos de los estudiantes y los profesionales que actualmente desempeñan modalidades no presenciales, no valorarían participar, si solo existiera la modalidad presencial. Es decir, que las nuevas modalidades, la semipresencial y la online, han generado nuevos mercados, metafóricamente denominados océanos azules, que han hecho crecer el número total de profesionales y el público objetivo interesado en trabajar. La presencialidad suponía una limitación, que las nuevas modalidades han superado, dando acceso al ejercicio profesional a colectivos que antes no podían”.

“La presencialidad híbrida, por tanto, permite acoger en un mismo espacio a los presentes en la sala físicamente y a los que están conectados virtualmente desde fuera de la sala, desde sus dispositivos. Tantos unos como otros disfrutan de la misma experiencia y la sala cuenta con medios tecnológicos que le permiten compartir el contenido con los presentes y con los remotos. Además, podrán verse unos a otros e interactuar entre sí gracias también a la tecnología. Se trata de mantener la misma experiencia, independientemente de dónde se encuentren los participantes”.

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