Raquel Gormaz, alumni

“Es curioso que uno trabaje diariamente en la imagen de diferentes marcas y no trabaje la suya propia”

Raquel Gormaz –Máster Universitario en Dirección de Publicidad Integrada– nos cuenta su experiencia en el programa de asesoramiento profesional del Club Alumni Nebrija, gracias al cual, ha logrado mejorar su perfil y optimizar su búsqueda de empleo.

Hemos tenido un año 2020 bastante duro, motivado por la incertidumbre y en algunos casos, el pánico a lo desconocido y sí, hablo del entorno profesional.

Muchas empresas han solicitado ERTE para sus trabajadores y otras han tenido que rescindir contratos a empleados que quizás hubieran supuesto para sus empresas un valor futuro incalculable.

Lo cierto es que una situación como la actual ha llevado a muchos a replantearse muchas cosas y a invertir el cuantioso tiempo en introspección personal, pero también profesional y es ahí cuando uno se da cuenta que el camino que en principio se quería seguir se bifurca o incluso desaparece, o se atisba más borroso mientras este se va alejando. Pero, también, hay personas que ven todo con una claridad absoluta y se les enciende una bombilla que les da la idea que buscaban para dar un vuelco a su vida.

Yo, personalmente, decidí darle un vuelco a mi vida profesional y tomar el mando para ser la que decidiera el camino, respecto a su forma, su color y, si me apuras, hasta su itinerario. Es por eso que decidí pedir ayuda a mi Universidad, porque sí, a veces es sano pedir ayuda, para observar el mismo paradigma desde distintas perspectivas y darte cuenta en qué errabas.

Y es en este punto en el que Cristina y todo el equipo de Nebrija Alumni me recondujo y me hizo ver que las cualidades que estaba explotando como profesional estaban mal enfocadas. Tenía que trabajar en algo en lo que ya tenía experiencia con marcas de diversos sectores, pero que hasta la fecha no había sido consciente ¡mi marca personal!

Es decir, yo contaba con una marca personal propia, pero no le había dado la unicidad que es necesaria para que haya una identidad común. Algo que me resultaba obvio para el resto de marcas, no lo había sido para la mía. Pero para eso estaban ellos, para ayudarme y darme algunos consejos que mejoraran mi perfil profesional.

Siempre he sido una profesional con auténtica vocación, alguien elocuente y con empatía. Ahora es el momento de aplicar la materia prima en la dirección correcta.

¡Gracias Nebrija por enseñarme el camino!

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