“Arabia Saudí es imprescindible para nosotros, a pesar del choque cultural”

La concesión de la construcción del AVE Medina-La Meca ha supuesto un gran empuje para las empresas españolas en Arabia Saudí y el planteamiento de nuevas relaciones con el país que han obligado a cambiar ciertos hábitos para poder llegar a un entendimiento.

Dada la importancia de este contrato, en la Semana del Derecho y las Relaciones Internacionales se organizó ayer una mesa con dos expertos en este caso: Joaquin Pérez-Villanueva y Tovar, ex embajador de España en Arabia Saudí; Mario Martínez, jefe de actuaciones internacionales de ADIF.

Pérez-Villanueva compartió sus experiencias como embajador en países que pueden parecer “menos cómodos” como Libia en lo que ha ejercido su labor. Sobre Arabia Saudí contó algunas de las características tanto geográficas, como la concentración de su población, como culturales.

También comentó como se vivió desde la embajada la concesión del proyecto del AVE Medina-La Meca. Uno de los problemas que afectaron a las relaciones y la confianza de los saudíes en el consorcio español adjudicatario fue la “falta de estructura sólida del consorcio y eso para negociar con un país tan exigente como Arabia Saudí, que son comerciantes desde hace siglos, era una desventaja”.

Por otro lado, afirmó que “construir un tren en el desierto tiene sus dificultades técnicas, pero no son insalvables” y uno de los puntos que el país tiene que mejorar son sus recursos humanos, ya que la mano de obra es poco cualificada y es necesario formar todavía al personal.

A pesar de los malentendidos que un principio pueda haber en las relaciones con las instituciones y empresas saudíes, Pérez-Villanueva pidió que no se dejaran llevar por las apariencias ni los clichés que se tienen sobre el país, puesto que estamos más próximos de lo que creemos y “Arabia Saudí es imprescindible para nosotros” en términos de oportunidades económicas para las empresas españolas.

Con esta idea coincidía Mario Martínez quien aseguró que las empresas españolas son muy demandas en el extranjero por su calidad y profesionalidad. “La facturación exterior de las empresas españolas ha aumentado un 40%. Las empresas se están externalizando y les va muy bien”. Para evitar problemas jurídicos, Martínez explicó que “la elaboración de una buena oferta es fundamental y lo que no se haga en esos momentos es difícil recuperarlo”. Además, él ha podido ver cómo la gente que trabaja en proyectos como el del AVE aprende a trabajar en estos países adquiriendo habilidades sociales y estudiando algo de sociología e historia que les ayudará a mantener unas relaciones cordiales.

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