El 17 de abril, el Instituto de Lenguas Modernas de la Universidad Nebrija, recibió a la profesora Boru Yang, doctoranda de la Universidad Gabriele d’Annunzio de Chieti-Pescara (Italia) y graduada en Caligrafía. Yang ha ganado varios premios en el mundo caligráfico y es miembro de la Asociación de Caligrafía China.
De su mano, y con la ayuda de las profesoras de chino, Li Ning y Ying Liu, los participantes tomaron contacto con el arte de la caligrafía china y pudieron practicar sus habilidades caligráficas.
La caligrafía china, además de ser una forma de comunicación, está considerada como una representación artística. Como indicó la profesora Yang, no es necesario conocer los caracteres chinos para apreciar el arte de la caligrafía. Son obras de arte en sí mismos. Es un arte que se expresa a través de cambios en trazos, estructuras y disposiciones para transmitir las emociones personales.
La caligrafía china rompe los esquemas mentales occidentales
En la parte más práctica del taller, la profesora Yang desveló que existen cinco tipos de escritura: de sello (zhuan shu), clerical (li shu), regular (kai shu), cursiva (xing shu), y de redacción (cao shu). Esta maestra de la caligrafía mostró a los alumnos las herramientas necesarias en esta disciplina. A saber: el pincel, que se divide según el nivel de dureza del pelo. La tinta, de la que existen cinco tonalidades diferentes dependiendo de la cantidad de agua que se añada. Y por último, el papel Xuan, también conocido como papel de arroz, que puede ser crudo, semimaduro y maduro.
Los participantes disfrutaron de la experiencia, aprendieron sobre la historia de la caligrafía china y, sobre todo, pudieron demostrar sus dotes caligráficas.
La originalidad de la caligrafía china es tan original que rompe esquemas del universo mental occidental.
Los restos más antiguos que se conocen de la escritura china datan están fechados en el segundo milenio antes de Cristo. Pertenecen a la época de la dinastía Shang y son los Yaguwen, inscripciones ejecutadas sobre huesos de animales y caparazones de tortugas. Este tipo de escritura antigua se ha vinculado con la magnitud espiritual, con el ejercicio de las prácticas adivinatorias y con la autoridad. Se utilizaba para imprimir las decisiones solemnes, como testimonios sobre cosechas o batallas. Estas inscripciones eran algo así como un metalenguaje comparable a la infografía actual.
