La tercera edición del Programa de Desarrollo para la Dirección “Mujer STEM, Ingeniera y Directiva” se clausuró con la entrega de diplomas en el campus de Madrid-Princesa de la Universidad Nebrija.
Quince mujeres han seguido el programa dirigido a que las ingenieras adquieran habilidades para acceder a puestos de responsabilidad. “Todavía nos queda camino por recorrer para conseguir que profesionales STEM estén en puestos de dirección, pero todas las altas direcciones de las empresas van a necesitar perfiles con estos conocimientos”, advirtió Ana Álvarez, directora de Executive Education y Formación Continua del Vicerrectorado de Ordenación Académica.
“La clave para transitar de la experiencia profesional a la experiencia directiva radica en ser capaces de conseguir que la inteligencia colectiva sea superior a la suma de las inteligencias individuales; y a la vez hacer uso de tecnologías para potenciar esa inteligencia colectiva”, apuntó por su parte el rector de la Universidad Nebrija, José Muñiz.
Ante la falta de vocaciones STEM entre la población femenina, Natalia Latorre, directora general de Transición Energética en ENAGÁS, hizo un llamamiento a “generar referentes que valgan a las niñas para decidir que son de ciencias, a las adolescentes para que se decidan por carreras STEM y, dentro de las organizaciones, para hacer que las técnicas comprendan que pueden llegar a ser directivas de una compañía”.
El acto de clausura del programa “Mujer STEM, Ingeniera y Directiva” contó con la participación de Luis Díaz Marcos, vicerrector de Ordenación Académica y Profesorado de la Universidad Nebrija; y de la representante de la promoción, Esther Moreno Cano, de Gestión de Proyectos en Talgo.
