Los alumnos de la Facultad de Comunicación y Artes también tuvieron ocasión de mostrar a sus compañeros y profesores sus primeros pasos en el mundo digital como emprendedores con distintas iniciativas que están llevando a cabo.
Borja Martínez creó su propio canal de Youtube, Alfonso de Castañeda lleva una página web con noticias sobre música, cine y series que nació por “la necesidad de hablar de gente de mi alrededor que me parecía que tenían mucho talento, pero que no tenían espacio en los medios de comunicación”. Paula Ruiz se abrió un canal en Youtube y llevaba sus redes sociales con contenido sobre moda, pero poco a poco se interesó en la fotografía y ahora quiere centrarse en ese aspecto profesionalmente.
María Cristina Arias, llamada Maky en sus redes, lleva un proyecto de coaching con el que ayuda a otros clientes emprendedores a iniciarse, cuidar sus marcas y “crear contenido de valor que conecte con los clientes”. Andy abrió su perfil en Twitter “Previously” también por una necesidad personal de encontrar información sobre series y sus temáticas desde un punto de vista que no encontraba en otras páginas web. “Empezamos con series y la comunidad ha ido creciendo hasta ocuparnos de música, juegos, cine, libros…” explicó Andy.
Todos ellos se mostraron de acuerdo en que a pesar de la gran cantidad de perfiles y páginas web que existen tratando los mismos temas “hay hueco para todo el mundo mientras e haga desde otro enfoque” aseguró de Castañeda. La clave para ellos ha sido contar las cosas como a cada uno le gustaría que se las contaran.
Borja Martínez quiso animar a todos sus compañeros que tuvieran la inquietud de comenzar un proyecto de estas características a dar el paso porque además tendrán la satisfacción de inspirar a otros a hacer lo mismo con su contenido. Sobre la plataforma de Youtube, Martínez explicó que no siempre monetizar los videos es la mejor idea, pero que la plataforma te abre puertas interesantes a otras colaboraciones con marcas, por ejemplo. Algo en lo que Paula Ruiz estuvo de acuerdo según su experiencia. Para Maky, “ser joven en la era en la que estamos no es una debilidad porque estamos rompiendo los moldes y emprendiendo de forma muy creativa”.
En cuanto a lo que su experiencia digital les ha aportado, todos aseguraron que habían aprendido mucho de esta primera aventura. Gestionar su tiempo, aplicar conceptos teóricos aprendidos en la universidad y ser más profesionales son enseñanzas que han sacado de sus respectivos proyectos: “ha sido llevar el learning by doing de la Universidad Nebrija más allá”, explicó de Castañeda.
Maky asegura que, aunque no ha sido su primer intento, repetiría la experiencia porque “si eres emprendedor no te lo puede quitar nadie y harás cualquier cosa por conseguirlo, no importa cuántas veces tengas que intentarlo”. Para todos, sus proyectos de emprendimiento digital han sido un éxito personal ya que han conseguido las metas que se habían propuesto y se atrevieron a dar el primer paso.
