CAFRE, un proyecto de recuperación de energía automotriz, gana el Premio Jóvenes Emprendedores Nebrija 2025

CAFRE, el proyecto creado por los alumnos del colegio IES Los Olivos de Mejorada del Campo (Madrid) Marco Gómez, Gonzalo Gómez, Pedro Fernández, Ricardo Isla Díaz y José Antonio Patras, tutorizados por José Manuel Payán, ha sido elegido el vencedor en la apasionante 27ª edición del Premio “Jóvenes Emprendedores”. Impulsado por la Facultad de Economía y Empresa de la Universidad Nebrija y su Club de Emprendedores, este certamen acoge cada año algunas de las mejores iniciativas empresariales originadas en el seno de colegios de toda España.

En esta ocasión, los jóvenes estudiantes provenientes del centro madrileño han desarrollado un dispositivo que permite alterar el perfil aerodinámico de los vehículos con unas toberas accionables. Estas contribuyen a reducir el gasto energético y de combustible tanto en las frenadas como en la fase de aceleración de los vehículos. El objetivo de esta iniciativa son, sobre todo, los camiones, los autobuses, los camiones y el ferrocarril, aunque “la verdadera oportunidad radica en instaurarla en el carenado de los modelos autónomos y electrificados”, reconocen sus creadores.

Dieciséis finalistas entre más de 70 iniciativas de colegios de toda España

El segundo premio recayó en el proyecto Smartfridge del IES José Saramago de Arganda del Rey. Creado por los estudiantes Álvaro Hernández, Diego Almarza, Andrés Hidalgo y David Cristian Simisdean y tutorizado por José Ignacio Sánchez-Campins, su objetivo es el de evitar que caduquen los alimentos que tenemos en la nevera. Para ello, el frigorífico llevaría incorporado en su marco un lector infrarrojo y que, conectado al teléfono móvil, nos mandaría una notificación cuando algún producto fuera a perecer.

En tercer lugar, quedó el IES Professor Broch i Llop de Vila-real (Castellón) con el proyecto Epot. Diseñado por Amalia Maria Matei, Doha Zarktouni, Ferrán Carda y Nerea Cardoso y bajo la tutorización de Inmaculada García, busca reducir el impacto de las cápsulas de café tradicionales para el medio ambiente. Estas pueden llegar a descomponerse más de cien años. Para ello, han sustituido el aluminio de las cápsulas de café por obulato, un producto hecho a base de almidón de patata, lecitina de soja y aceite de girasol que se deshace al contactar con el agua.

Un total de 16 proyectos finalistas de 70 en total han formado parte de la 27ª edición de estos premios que aúnan el emprendimiento con el ámbito educativo y escolar. Los participantes de colegios de toda España acudieron temprano al Salón de Actos del Campus de la Politécnica y Ciencias Sociales en Madrid-Princesa. Y durante toda la mañana estuvieron compartiendo y mostrando a todo el que se acercaba sus interesantes iniciativas.

 

Una gran motivación

“Acudir a este tipo de iniciativas y conocer un poco ya la Universidad y los profesores y profesionales que la conforman, muchos de ellos con ideas brillantes, me parece una muy buena motivación para nuestros estudios”, afirmaba Marcos García, estudiante del colegio madrileño Obispo Perelló. En la misma línea, su compañera Claudia García, reconoció que este encuentro demuestra “el gran futuro de los jóvenes y las buenas ideas que hay en muchos de ellos. Ambos, junto al alumno Álvaro Beltrán, han creado el proyecto Raíz Viva, cuya finalidad es la de desarrollar un restaurante en el barrio madrileño de Ciudad Lineal en el que el menú esté compuesto principalmente por excedentes agrarios.

Cada uno de los grupos, asimismo, ha presentado sus iniciativas ante un jurado profesional compuesto por los expertos y docentes en turismo, innovación educativa y emprendimiento Ana Asensio Ciria, Jorge González de la Fuente y Francisco Javier Navarro. En esta edición, la votación del jurado representó el 80 % de la puntuación total y la del público, quien podía votar por su proyecto favorito a través de un código QR, el 20% restante.

Emprendedores desde edades tempranas

“El objetivo de este concurso es fomentar el emprendimiento desde edades tempranas, desarrollar esa semilla emprendedora y ese gen que muchos tienen en el ámbito escolar y que luego en la universidad realmente puedan desarrollarlo aún más”, declaraba Álvaro Rodríguez, director del Máster en Dirección Comercial y Marketing Digital de la Nebrija Business & Technology School y uno de los organizadores principales del encuentro.

Un encuentro del que ya han formado parte miles de jóvenes emprendedores e iniciativas en sus veintisiete años de historia y en el que la creatividad, la organización y la ilusión de los jóvenes confuyen cada curso. “Quiero animar a las futuras generaciones a participar en el concurso, ha sido estupendo”, afirmó el alumno Daniel Collazo Barcia del colegio Nebrija Torre de Hércules (A Coruña) ante la sonrisa de sus compañeros.

Texto: Pablo Martínez Dorado / Fotografías: Nacho Nava.

Los comentarios están cerrados.