Carlos González Bravo: La enseñanza de la Arquitectura en Nebrija se apoya en dos pilares básicos: Las Bellas Artes y la Ingeniería

El Director de la Escuela de Arquitectura de la Universidad Nebrija nos cuenta todos los detalles del nuevo grado

– La Universidad Nebrija imparte este curso el nuevo Grado en Arquitectura de la Universidad Nebrija ¿Qué tal ha comenzado el curso?

Lo cierto es que ha sido un comienzo enérgico y muy ilusionado por parte de todo el personal de la Universidad, que inevitablemente se ha trasmitido al alumnado desde el curso 0 (de nivelación). A pesar de que las materias de primer curso son por defecto de bloque propedéutico, el funcionamiento del Club Arquitectura Nebrija vertebrará el contacto entre el alumno de primero y la realidad arquitectónica de la ciudad.

– ¿Puedes contarnos cómo nace esta titulación?

La puesta en marcha de la Escuela de Arquitectura ha significado el colofón de varios años de diseño y preparación de un plan enraizado en las bases del conocimiento profundo del Arte y la Técnica. Desde la Universidad Nebrija entendemos que el Arquitecto debe poseer, en el GRADO, la singular especificidad con que la profesión se desenvuelve en España y es reconocida fuera de ella.

– Como arquitecto, ¿cuáles son los puntos fuertes del grado en arquitectura de la Universidad Nebrija?

La enseñanza de la Arquitectura en la Universidad Nebrija se apoya en dos pilares básicos. Las Bellas Artes y la Ingeniería. De ahí nace y se retoma el modelo de “L’huomo Universale”, que sin duda representó en el renacimiento al artista entre los artistas. Creo que éste, sin lugar a dudas, será el rasgo diferenciador de la Arquitectura en la Universidad Nebrija y marcará el rumbo de sus futuros egresados.

– Acabas de publicar un artículo en CERCHA, revista oficial del Consejo General de la Arquitectura Técnica de España. ¿Cómo compaginas tu labor docente con el trabajo de investigación?

Bueno, quizá la pregunta sería cómo es posible separar ambas realidades. Enseñar implica investigar y la investigación implica enseñar. No concibo una sin la otra, y creo que la actividad docente se nutre de la investigación y viceversa. La Arquitectura es una profesión compleja y tremendamente rica en matices que conlleva el estudio sistemático de las nuevas realidades y tecnologías que se van descubriendo. Si es uno mismo el que las descubre, su misión social, y así lo inculcamos en el alumnado, es la difusión de la obra creada. Entiendo además que el arquitecto debe ser una persona que resuelva problemas reales, ya sea sobre la sustentación del espacio o sobre la creación y distribución del mismo.

– La Universidad ofrece la posibilidad de estudiar Arquitectura junto a otra titulación. ¿Cuáles son y qué ventajas tiene estudiar una doble titulación?

Realmente en la Universidad Nebrija tenemos tres dobles titulaciones con Arquitectura. Arquitectura más Bellas Artes, que sería uno de los pilares de los que antes hablaba. Arquitectura más Diseño Industrial, que implica adentrarse valientemente en el mundo del diseño de producto desde la óptica del Arquitecto. Y finalmente Arquitectura más Ingeniería de Edificación que sería el otro pilar básico. Las ventajas de las dobles titulaciones son fundamentalmente dotar al futuro egresado de la formación más completa, competitiva y rica posible de cara a encarar el mercado laboral desde la parte más ata de la contratación.

– Aún queda tiempo para que los alumnos del nuevo grado finalicen sus estudios, pero puedes adelantarnos ¿cuáles serán las características principales de los arquitectos que hayan estudiado en la Universidad Nebrija?

Como ya he mencionado antes, el futuro Arquitecto de la Universidad Nebrija será capaz de demostrar las habilidades y competencias profesionales en el marco laboral de su futura carrera profesional con alta capacitación y resolución tanto artística como técnica.

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